domingo, 31 de julio de 2011

La Sala Plenaria de Parque Central recuperó su pasado esplendor

Con una inversión de 4,7 millones de bolívares se restauró el suelo, se trató la madera de las esculturas cinéticas, se sustituyeron las alfombras y los mesones, se reconstruyeron los asientos y el mobiliario
La Sala Plenaria de Parque Central, recientemente recuperada por la Fundación Propatria 2000, fue inaugurada en 1972 con motivo de la realización de la conferencia de las Naciones Unidas sobre los derechos del mar. Se encuentra ubicada en el complejo habitacional, cultural y comercial de Parque Central en Caracas.
Pero la sala perdió su esplendor de antaño; fue abandonada y se convirtió en hogar de indigentes, quienes la desvalijaron casi en su totalidad. Después, en 2004, ocurrió un incendio en la torre este del complejo, situación que incrementó su deterioro ya que fue víctima de los escombros que caían de la siniestrada edificación de oficinas.
El presidente de la República, Hugo Chávez, ordenó su rehabilitación total, y recordó que este fue el vientre donde el MVR (Movimiento Quinta República) se gestó. Para los trabajos fueron aprobados 4,7 millones de bolívares.
El espacio está conformado por dos salas: la Plenaria, con 776 sillas y 16 mesas de trabajo donde se ubicaron las delegaciones durante la conferencia de las Naciones Unidas en 1972; y la sala de prensa, en el nivel superior, con 186 sillas y las comodidades para la instalación de medios audiovisuales.

Las obras

Según explicó Vilma Rodríguez, presidenta de la Fundación Propatria 2000, en un mes se recuperó el lugar. Los trabajos se iniciaron con estudios de las obras arquitectónicas y artísticas como las que hay en las paredes de todo el aforo, que están forradas con una escultura cinética realizada en madera, y el techo en aluminio.
Las maderas fueron restauradas in situ para evitar la modificación de la obra. El trabajo incluyó un tratamiento del material orgánico con distintos químicos para limpiarlas de termitas y otros insectos que amenazaban con destruirlas. Posteriormente fue aplicada una capa de sellante especial para evitar que fuese atacada de nuevo.
El cielo raso también fue atendido por los restauradores, agregó Rodríguez, quienes después de comprobar los anclajes y la estabilidad de la estructura, revisaron minuciosamente cada una de las piezas para después limpiarlas y aplicarles químicos que resaltaran su brillo.
Los electricistas cambiaron las lámparas y luminarias para adecuarlas a las nuevas tecnologías de ahorro energético e implementar medidas de seguridad, todas revisadas rigurosamente por los bomberos en cumplimiento de las medidas de seguridad necesarias para este tipo de espacios.

La sala

Rodríguez explicó que el trabajo de la Fundación también incluyó la restauración del suelo de madera como complemento de la acústica de la Sala Plenaria. Detalló que los expertos diagnosticaron que era necesario intervenir y reconstruir 3% de su superficie, y 97% restante fue sometida a una minuciosa restauración.
Las alfombras usadas para recubrir la madera del suelo fueron sustituidas en su totalidad, ya que las originales estaban completamente dañadas. “Ahora se colocaron unas con material retardante en caso de incendio, según las recomendaciones de los bomberos”, dijo.
Los 16 mesones usados por las delegaciones para su trabajo fueron reemplazados. Los anteriores, que eran de fórmica, presentaban avanzado estado de descomposición debido a la humedad producto de las filtraciones que se generaron por la rotura del techo; esto, como consecuencia de la caída de material proveniente del incendio de la Torre Este.
Los nuevos mesones disponen de mecanismos para conectar laptop y otros equipos electrónicos, así como iluminación y un sistema de comunicación telefónica interna y externa, con acceso al discado directo nacional e internacional.
Los asientos y el mobiliario fueron reconstruidos en su totalidad, participó Rodríguez. Las bases y partes metálicas de las butacas se sacaron de las instalaciones para quitarles el óxido y aplicarles un nuevo recubrimiento que les permita extender su vida útil. Los asientos y respaldos que presentaban deterioro, se reconstruyeron con resina más resistente que la original, y fueron tapizados con una tela que garantiza mayor resistencia al uso y comodidad para las usuarias y los usuarios.

El podio

Rodríguez dijo que el podio, construido en concreto y revestido de mármol negro, necesitó el reemplazo de sus cuatro placas superiores, que también resultaron dañadas durante el tiempo que estuvo abandonado. Las escaleras y los escritorios de los secretarios se incluyen dentro de la recuperación.
Uno de los temas pendientes, en los cuales trabajan los electricistas de la Fundación, es el cambio completo de la acometida eléctrica original de 1972; esto, para adaptarla al consumo energético actual, lo que impedirá que sucedan interrupciones en el suministro eléctrico.

Última tecnología

Otro trabajo que realizó el equipo de restauración de la Fundación Propatria 2000 es la adecuación tecnológica para actividades de alto nivel, como el realizado el lunes 25, cuando el vicepresidente Ejecutivo de la República, Elías Jaua, presentó las pruebas científicas que certificaron que los restos del Libertador Simón Bolívar son los que descansan en el Panteón Nacional.
El sistema de sonido, que había sido desvalijado, se sustituyó con un equipo de alta fidelidad y se instaló una consola de audio digital, desde donde se pueden controlar una docena de micrófonos alambricos y ocho micrófonos inalámbricos. “La calidad del nuevo sistema de audio, garantiza que todos los asistentes aprecien los eventos con igual calidad desde todas las ubicaciones”, dijo Rodríguez
Además de esta innovaciones, la sala cuenta con una red Wifi de alta velocidad para el acceso a internet de manera inalambrica, y una fibra óptica para hacerlo mediante conectores R-45. La fundación colocó un video beam que permite la proyección de material multimedia en una pantalla gigante instalada en el medio del podio principal, y dos juegos de pantallas a cada lado del auditorio.
El ambiente interno de la sala y de sus pasillos es mantenido con los aires acondicionados del complejo Parque Central, que surte de agua helada al sistema de ventilación del local, con lo que se mantiene una temperatura agradable para las y los asistentes.
Rodríguez enfatizó que el trabajo que se realizó bajo la estricta supervisión del Cuerpo de Bomberos, que por normativa obligaron a acondicionar salidas de emergencia debidamente identificadas para un rápido desalojo en caso de presentarse una emergencia.
Recalcó que el trabajo fue concluido también gracias a la articulación con la junta liquidadora del Centro Simón Bolívar, la cual se encargó de acondicionar y recuperar los espacios periféricos de la sala para un mayor disfrute de las y los visitantes. “Esta era la última pero la más importante de las salas que reacondicionamos dentro del complejo Parque Central”, finalizó.

Exterior

La presidenta de la Junta Liquidadora del Centro Simón Bolívar, Natali Ramírez, explicó que las cuadrillas de obreros, jardineros y electricistas recuperaron los materos, paredes e infraestructura de los alrededores de la Sala Plena, para que las usuarias y los usuarios, pudieran no solo disfrutar del sitio, sino de los espacios que lo rodean.
Ramírez explicó que el trabajo de su oficina también incluye la rehabilitación de fuentes y espejos, “que estaban abandonados y eran sitios tomados por la delincuencia; ahora los humanizamos”.
T/David Rosas
F/Miguel Romero
Caracas

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