domingo, 7 de agosto de 2011

Parques de Guayana seducen a cientos de turistas

Ciudad Guayana.- La belleza casi hipnótica de un ecosistema único e inigualable ha logrado seducir a cientos de personas quienes, desde ya, apartan espacios en sus agendas para visitar y contemplar la magia de la naturaleza que encierra nuestro municipio Caroní.
Los parques urbanos -Cachamay, La Llovizna y Leofling- son, sin lugar a dudas, uno de los atractivos más emblemáticos que Ciudad Guayana muestra con orgullo al resto del mundo y que, durante épocas de vacaciones, se convierten en las opciones para la recreación en familia.
Adornando estos escenarios, las diversas especies de flora y fauna propias de la región se mezclan entre la multitud sin pasar desapercibidas. Chigüire, venados, lapas, monos araguatos, monos viudos, perezas de dos dedos, corales, iguana común, por ejemplo, se dan a conocer.
Los araguaneyes, samanes, caobas, robles, ceibas, entre otras especies serán el tema de conversación en otras zonas del país y, seguramente, el resto del mundo. Y es que estos parques reciben todos los años a gente de Monagas, Delta Amacuro, Anzoátegui, Zulia, Caracas y, más allá de nuestras fronteras, a turistas de Colombia, Brasil y hasta España.
Parque Cachamay
Al menos 52 hectáreas posee el parque Cachamay, cuyas áreas invitan a las empresas básicas a desarrollar planes vacacionales, a los deportistas al entrenamiento de wu-shu, atletismo y otras actividades físicas y a la familia a pasar un fin de semana agradable. Abre sus puertas desde las 5:30 am hasta las 5:30 pm todos los días.
Durante esta temporada de vacaciones el número de visitantes ascendió. El sábado 30 de julio ingresaron 2.610 personas; el 17 de julio, día del niño, 12.655, pero según el conteo mensual llevado por los guardaparques adscritos al Departamento de Parques y Jardines de la CVG, más de 30 mil usuarios usaron las instalaciones para actividades diversas.
Desde el Cachamay se puede acceder al zoológico Leofling, sólo hay que recorrer a pie una caminería de 1.300 metros. Una vez en el lugar, será inevitable contemplar exóticos animales. Observar estas especies será, según personas consultadas, un momento de perplejidad.
En el estacionamiento del parque, fueron dispuestos improvisados puestos para la venta de artesanía, comidas y bebidas.
Parque La Llovizna
A través de un convenio de cooperación, conservación y mantenimiento firmado entre la Gobernación del estado Bolívar y Corpoelec, se dio inicio a una etapa de acondicionamiento de las 200 hectáreas de este escenario rodeado de zonas boscosas. Quizá el acuerdo fue sellado por la cercanía de la temporada vacaciones, pero muchos desean que las labores de mantenimiento que contiene el documento perduren.
500 personas al día están entrando a este parque, único en el mundo según el gobernador Francisco Rangel Gómez. Funcionarios de la Guardia Nacional Bolivariana (GNB) y funcionarios de seguridad de Corpoelec reciben a los visitantes y haciendo uso de la cordialidad que se amerita en el caso, solicitan una breve revisión de los morrales y bolsos.
La cosa es que no escondan allí bebidas alcohólicas y herramientas para la pesca. Lo primero no está permitido porque estamos ante un espacio familiar y lo segundo porque estarían destruyendo la fauna del parque”, comentó un agente de seguridad.
Dispuestos ya a adentrarse en el recorrido por La Llovizna, se recomienda hacer una parada en la “laguna de peces”, donde por un monto bastante accesible puedes navegar el estanque en una pequeña embarcación.
También recomiendan pasar por la “maloca artesanal”, ubicada en uno de los estacionamientos del parque. Allí fueron dispuestas especies de mini tiendas para el expendio de artesanía, figuras de arcilla, flautas de bambú, pintura de cayena.
Además, se puede conseguir comestibles como chicharrones picantes, jalea, mayonesa de mango, miel y cremas a base de miel. La seguridad está garantizada, pues según el mentado convenio, agentes de la Policía del estado Bolívar (PEB), se encargarán de custodiar toda la zona con el objetivo de garantizar tranquilidad a cientos de usuarios.
Macagua turística
En la avenida Leopoldo Sucre Figarella, sentido San Félix-Puerto Ordaz, una “maravilla” es contemplada a diario por los residentes. Cuando la Central Hidroeléctrica Antonio José de Sucre (Macagua) abre sus compuertas para liberar el agua y aliviar la represa. Se hace en época de lluvia.
La corriente de agua produce una especia de bruma que llama mucho la atención. El agua de la represa alimenta el Salto La Llovizna, cuya cascada es de 20 metros de altura y el espectáculo de su caída se puede presenciar con esplendor desde el mirador Pica-Pica de La Llovizna.
Johan Figueroa y Andreina Perovic manifestaron que en ninguna otra parte del país es posible visualizar tanta maravilla.

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Dejanos tus comentarios, informaciones y sugerencias.

Seguidores